Aún estás a tiempo para renovar tu piel

Aún estás a tiempo para renovar tu piel

¿Días grises? Nada de eso, este otoño la piel se renueva y brilla por sí sola. En este artículo te contamos porqué esta temporada es ideal para reparar los daños que dejó el verano y revitalizar la piel desde el interior.  

 

Aunque el verano es una de las temporadas que más disfrutamos (¡nadie nos quita lo comido y lo bailado!), en lo que respecta a la piel las cuentas no son tan alegres. El sol, la deshidratación y el relajo en las rutinas, incluidas la de skincare, hacen que la piel llegue al otoño pidiendo a gritos un SOS.  

 

La buena noticia es que las características de esta época, al tener baja radiación UV la hacen ideal para limpiar, renovar y nutrir la piel en profundidad, con el menor riesgo. Además, este tiempo de transición es perfecto para recuperar los niveles de hidratación y así fortalecer la piel para la llegada de los meses más fríos.

 

Exfoliar para renovar

 

La exfoliación es uno de los pasos más importantes en la rutina de skincare, pero también de los que genera más dudas sobre su frecuencia, productos y ejecución. Y seamos honestas, además es unos de los tratamientos que más relegamos al olvido y que postergamos cuando nos gana la flojera.

 

Por eso, lo primero es entender su importancia: la capa más superficial de la epidermis está formada por células muertas que se acumulan en la superficie, como una consecuencia natural de la renovación celular. Esas células muertas se desprenden poco a poco, pero a partir de los 30 años esta renovación se ralentiza, haciendo que esta capa se engruese y que obstruya la piel, dándole una apariencia opaca y apagada. Además, como los poros están tapados, cualquier producto de skincare que utilicemos, no penetrará en profundidad.

 

Entonces para hacer que la renovación celular se siga produciendo, es clave exfoliar. Respecto a la frecuencia del tratamiento, todo dependerá del tipo de exfoliantes que uses (hay físicos, químicos) y claro, de tu tipo de piel. Y siempre considera que igual de importante que exfoliar, es no sobrexfoliar, porque puedes debilitar la barrera de protección cutánea. Así que se matea, pero sin que se te pase la mano.

 

  • Ácidos AHA

 

Los exfoliantes químicos funcionan como peelings suaves que podemos hacer en casa, ya que su concentración de principios activos es baja. Son muy efectivos, y además de exfoliar, controlan la secreción de sebo. Dentro de este grupo, los principales activos son los alfahidroxiácidos (AHAs), como el glicólico, láctico o mandélico; los betahidroxiácidos (BHAs), como el ácido salicílico; y los polihidroxiácidos (PHAs). Pero tranquila, no te daremos una clase de química, vamos al grano.

 

Los AHA son uno de los componentes más efectivos si se trata de renovar la piel, ya que aumentan la velocidad del ciclo de renovación de las células muertas, promoviendo la descamación, mejorando la textura de la piel y aportando luminosidad. A la cabeza de esta categoría está el ácido glicólico, seguro lo has escuchado, uno de los más cotizados en la industria. Su gran ventaja frente a otros ácidos es que actúa como exfoliante y antioxidante, y estimula la producción del ácido hialurónico, con lo que hidrata la piel.  

 

¡Bendito retinol!

 

No es precisamente un recién llegado. El retinol comenzó a usarse hace más de 40 años y hoy es uno de los componentes más populares en la industria cosmética, ¡y con justa razón! Entre sus múltiples beneficios, este derivado de la vitamina activa la renovación celular desde el interior; estimula la producción de colágeno; mejora el tono y textura de la piel; atenúa arrugas, líneas de expresión y manchas superficiales; es antioxidante; y revierte el fotoenvejecimiento.

 

Aunque muchas personas creen que el retinol exfolia, esta NO es una de sus propiedades. Lo que hace es renovar la piel desde el interior y a nivel celular, haciendo que las capas más profundas y sanas sustituyan a las más envejecidas o dañadas. Su efecto es muy similar al de un exfoliante, pero los caminos son diferentes.

 

Precisamente esta similitud en sus funciones hace que el retinol y los ácidos AHA sean increíbles opciones si se trata de renovar la piel. Y en MINATA tenemos dos poderosos productos que te ayudarán en esta misión: el Sérum Renovador de Noche con AHA 12% y Bálsamo Soñado de Retinol 0,5% y Bakuchiol 2%. Ambos productos sirven para todo tipo de piel, pero NO se recomiendan en en pieles sensibles o sensibilizadas.

 

El Sérum Renovador de Noche con AHA 12% es una excelente opción para pieles mixtas grasas o definitivamente grasas. El Bálsamo Soñado de Retinol y Bakuchiol se recomienda para pieles más maduras, es decir de 35 años hacia arriba.

 

Ahora aquí lo más importante de todo, estos dos productos NO deben usarse en la misma rutina de skincare. Pueden usarse en noches diferentes durante la misma semana, pero nunca al mismo tiempo ya que al tener concentraciones tan eficaces pueden ser demasiado para tu piel.

 

 

Y ya que estamos en el momento de las advertencias el retinol está contraindicado durante el embarazo y el período de amamantamiento. El Renovador por su parte puede usarse durante el embarazo, pero siempre bajo supervisión médica.

 

Y recuerda que, aunque ya estemos a fines de otoño y la radiación UV es menor, siempre debes recurrir a la fotoprotección más alta (SPF 50) luego de usar cualquiera de estos dos componentes (retinol o ácidos AHA), porque la piel queda muy sensible. Con esa importante precaución, tienes luz verde para incorporar estos poderosos activos en tu rutina de skincare otoñal y ver cómo tu piel se renueva y luce su mejor versión esta temporada.

 

By María Paz Maldonado